He decido titular la entrada del
blog del día de hoy como el título de un libro que he conocido
recientemente y que me ha parecido muy interesante.
El autor de dicho libro es Allen Frances. Frances es un psiquiatra norteamericano que presidió el grupo de trabajo del DSM-IV (Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales), manual en el que se describen y clasifican los diferentes tipos de patologías mentales.
Para él, el problema es que no existe una definición clara de lo que es "normal". Por tanto, la valoración de lo que es normal o no, dependerá del criterio que podamos usar para ello.
Así, en función del criterio empleado, el duelo puede ser considerado como un proceso normal que las personas realizamos después de la muerte de un ser querido o, tal y como indica el manual diagnóstico que arriba he citado (el DSM-IV), si la intensidad de los síntomas que presenta la persona es alta, puede ser diagnosticado, pasados los dos meses, como un trastorno depresivo.
Lo mismo sucede con otros problemas, como los trastornos relacionados con problemas en la atención, tales como el conocido TDAH. Muchas personas son diagnosticadas de este problema por presentar dificultades para atender, cuando dichas dificultades pueden ser consecuencia de cualquier otro problema, como por ejemplo tener un trastorno de ansiedad o, simplemente, aparecer en personas más despistadas que otras.
Estos son solamente dos ejemplos, pero la realidad es que la tendencia actual es considerar que la ansiedad, las preocupaciones, la tristeza o el mal comportamiento de los niños son patológicos. Sin embargo, en realidad, son emociones que forman parte de nuestras vidas, siendo normal sentirse de esa forma en muchos momentos de nuestra existencia sin tener que ser necesariamente disfuncionales.
El autor de dicho libro es Allen Frances. Frances es un psiquiatra norteamericano que presidió el grupo de trabajo del DSM-IV (Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales), manual en el que se describen y clasifican los diferentes tipos de patologías mentales.
Para él, el problema es que no existe una definición clara de lo que es "normal". Por tanto, la valoración de lo que es normal o no, dependerá del criterio que podamos usar para ello.
Lo mismo sucede con otros problemas, como los trastornos relacionados con problemas en la atención, tales como el conocido TDAH. Muchas personas son diagnosticadas de este problema por presentar dificultades para atender, cuando dichas dificultades pueden ser consecuencia de cualquier otro problema, como por ejemplo tener un trastorno de ansiedad o, simplemente, aparecer en personas más despistadas que otras.
Estos son solamente dos ejemplos, pero la realidad es que la tendencia actual es considerar que la ansiedad, las preocupaciones, la tristeza o el mal comportamiento de los niños son patológicos. Sin embargo, en realidad, son emociones que forman parte de nuestras vidas, siendo normal sentirse de esa forma en muchos momentos de nuestra existencia sin tener que ser necesariamente disfuncionales.
Hola,
ResponderEliminarmuy interesante la entrada. Por curiosidad, buscando sobre el TDAH he visto que parece que su decubridor reconoce públicamente que es una enfermedad inventada con el fin de lucrarse en asociación con las farmacéuticas.
http://actualidad.rt.com/ciencias/view/95483-psiquiatra-descubrio-tdah-enfermedad-ficticia
http://www.youtube.com/watch?v=pIgj_gH1aXI#t=48
Por otra parte, hace no mucho, leí en la revista XLSemanal a este mismo autor que nombras, Allen Frances, denunciando que las farmacéuticas habían conseguido una victoria en la definición del nuevo manual DSM-V. Por lo que se comentaba en ese artículo, se han incluído varias enfermedades que no lo son ya que sus "síntomas" son parte de la vida cotidiana y no tienen ni una definición precisa ni un tratamiento eficaz. Afirma que "Vamos camino de ser una sociedad adicta a las pastillas". Me parece una opinión muy a tener en cuenta ya que Allen Frances participó en la definición del anterior manual, el DSM-IV.
Disculpa la opinión tan larga pero me ha parecido interesante aportar esto ya que recientemente lo había leído y me pareció tan impactante que aún lo conservaba.
Seven.
Muchas gracias por tu opinión. Además, te has documentado mucho y has puesto las fuentes para que los demás podamos leerlo también. Por desgracia, cada día estoy más de acuerdo con Allen Frances. Ojalá tratáramos de ayudar más a nuestros pacientes, en vez de centrarnos en los beneficios que nos aporta que existan las enfermedades mentales.
ResponderEliminarVa ser que si, nadie es perfecto.
ResponderEliminarxz