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martes, 3 de febrero de 2015

Aprendiendo a manejar las emociones

Para poder intervenir con las personas que presentan trastornos alimentarios tendremos que hacer una amplia recogida de información, desde los datos que ya solemos recoger habitualmente, hasta los específicos de la alimentación (peso, IMC, si ha realizado dietas o no, si se purga (léase entrada del blog ¿Cuáles son los trastornos alimentarios?) de alguna manera, si se da atracones, etc...).

Otro de los aspectos fundamentales en los que tendremos que centrar nuestra atención es en el apego (si queréis saber algo más sobre este tema podéis leerlo en la entrada que he escrito acerca del apego: "Lo más importante, el amor") que han formado estas personas cuando eran niños con sus cuidadores principales. 



El apego es el vínculo que se genera entre el cuidador y el niño. La figura de apego es la que nos proporciona el alimento, así como la seguridad, calma y consuelo en los momentos en los que nos sentimos amenazados. 

Cuando los niños son pequeños internalizan que mamá los lleva al cole, pero que va a estar a la hora de la salida para recogerlos y que podrán pasar luego un ratito con ella. Ya desde edades muy tempranas entienden que su madre no les está abandonando, que es sólo una separación temporal y que se pueden ir con tranquilidad con el resto de los niños de su clase.

Aunque, generalmente, no se observa que las personas con trastornos alimentarios hayan tenido familias caóticas o cuidadores que no se hiciesen cargo de ellas, sí que ocurre en muchos casos que no han podido aprender a regularse emocionalmente a partir de esta relación establecida con sus figuras de apego. En la mayoría de las ocasiones, este aprendizaje no ha tenido lugar no por mala fe de los padres o porque "pasaran de ellos", sino porque sus propios progenitores tampoco saben regular sus emociones de forma adecuada.

Por tanto, algo que debemos explorar y, probablemente tendremos que trabajar es la regulación emocional. Sin embargo, el primer paso va a ser ganar su confianza. Esto no será fácil de entrada, ya que la mayoría no van a presentar conciencia de enfermedad, por lo menos inicialmente, y tendrán poco interés en cambiar sus pautas de alimentación actuales.

martes, 20 de enero de 2015

Trastornos alimentarios, ¿un problema nuevo?

Los trastornos alimentarios son bastante comunes en nuestros días y se consideran una patología que ha ido en aumento progresivamente en los últimos años.

De hecho, en la actualidad han causado una importante inquietud sanitaria y alarma social, motivo por el que cada día se están realizando más investigaciones con el objetivo de conocer cuáles son sus causas, los abordajes que han demostrado ser más eficaces, etc...

Sin embargo, a pesar de que hoy en día estén muy presentes, la realidad es que estos trastornos no son un problema nuevo, sino que sus comienzos datan de finales del siglo XIX.


Es en esta época denominada "victoriana" en la que aparecen encontrarse los factores socio-culturales que explican el origen de dicha problemática alimentaria. Algunos de estos factores son los siguientes:
  • Se considera la delgadez como modelo corporal relacionado con el éxito social, observándose que muchas mujeres llevaban corsés que las apretaban (teniendo incluso dificultades para  respirar con normalidad) para poder adaptarse a los vestidos de la época que exigían tener un cuerpo con una cintura muy estrecha.  
  • Aparece la imagen de la mujer como un ser frágil y delicado.
  • Factores como el hecho de tener una tez pálida se consideraba como un símbolo de tener unos modales exquisitos y refinados.
  • Existen descripciones en las cuáles se detalla que ya en el siglo XIX había personas que se provocaban el vómito después de ingerir grandes cantidades de comida.
  • Era muy común la utilización de dietas e importantes restricciones alimentarias para poder conseguir el cuerpo deseado.

Todos estos factores siguen estando presentes en muchas de las ideas que mantienen algunas personas que actualmente presentan trastornos alimentarios, por lo que parece que en esta época ya se estaba produciendo el caldo de cultivo que daría lugar a la problemática que observamos a día de hoy.